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8 PASOS PARA COMER SIN ANSIEDAD

Como os he dicho otras veces, si no hago dieta no suelo darme atracones, soy más de picoteo continuo desde que me levanto hasta que me acuesto.
La semana pasada diseñé mi menú semanal e hice una compra acorde con él. Lo imprimí y lo pegué en la pared de la cocina. Y me propuse no comer absolutamente nada que no estuviese incluido en él. Y así lo he hecho.
Desde que descubrí que soy comedora compulsiva, he estado a dieta o he comido normal, pero nunca hasta ahora, en ningún momento, había controlado la compulsión por la comida. Si estaba a dieta de proteínas, picaba entre horas cosas aptas, pero no paraba de comer en todo el día.
No ha sido hasta el lunes 2 que empecé a ceñirme a las 5 comidas diarias y lo único que he tomado entre horas, han sido líquidos. A esto, los comedores compulsivos, lo llamamos ABSTINENCIA. No atracones, no picoteo.
Pues bien, yo hoy he cumplido mi primera semana de abstinencia. No podría jurarlo, pero es muy probable que sea la primera semana que no picoteo desde que dejé la dieta hace cerca de tres años. Y conseguirlo me ha hecho sentir realmente bien. No ha sido fácil, la cabeza sigue pidiendo comida 24 horas al día, es una lucha extenuante por no comer, pero es una batalla que no podemos seguir perdiendo. Al menos yo no puedo. NO QUIERO.

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Después de volver de vacaciones, aún recuperé un kilo y algo. Ya sabemos que los kilos que ganamos recientemente no cuesta mucho perderlos. Así, con mi abstinencia y comiendo saludable, he bajado 2’4 kilos esta semana. Eso puede dar una idea de la ingente cantidad de comida que podemos llegar a tomar los comedores compulsivos sin darnos cuenta. Tremendo!